una ex secretaria de la empresa Coca-Cola fue condenada a 8 años de prisión por conspirar para robar los secretos comerciales de la compañía y vendérselos al rival refresquero Pepsi.
Joya Williams, de 42 años, sentenciada en Atlanta, Estados Unidos, planeaba vender los documentos robados y ejemplos de nuevos productos por al menos US$1.5 millones.
Sin embargo, luego de recibir una carta en la que se ofrecía la información a quien diera más, funcionarios de Pepsi llamaron a Coca-Cola para advertirles lo que pasaba.
El cómplice de Williams, Ibrahim Dimson recibió una sentencia de cinco años de cárcel. Él y otra persona, Edmund Duhaney, habían admitido culpabilidad. Las tres personas habían sido acusadas en julio de 2006.
"Ésta es la clase de delitos que no pueden ser tolerados en nuestra sociedad", dijo el juez de distrito J. Owen Forrester al sentenciar a Williams, según la agencia AP.
Un corresponsal de la BBC señaló que la sentencia fue más alta que la que había solicitado la fiscalía.
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